HÁBITOS SALUDABLES DURANTE EL CONFINAMIENTO POR CORONAVIRUS

 La Organización Mundial de la Salud define la salud como el estado de bienestar físico, psicológico y social, no sólo la ausencia de enfermedad.

Estos días posiblemente estemos focalizando nuestra atención sobre todo en la segunda parte: la ausencia de enfermedad.

Nos preocupa el contagio y por ello, de forma responsable mantenemos y cumplimos las medidas necesarias para ello: salir sólo para lo imprescindible, mantener una distancia interpersonal, lavarnos las manos de forma apropiada, utilización de guantes, mascarillas, higiene de la casa, la ropa, el lugar de trabajo…

Igualmente, quienes tengan algún síntoma o hayan estado cerca de alguna persona afectada, han de quedarse en casa, en una habitación aparte del resto de la familia y contactar con el teléfono habilitado a tal fin para seguir las instrucciones establecidas.

Este punto inicial, que hace referencia a la salud física o de ausencia de enfermedad parece ser el primordial. Y posiblemente, si fuese cuestión únicamente de un par de días quizás no tuviese mucha trascendencia dejar de lado el resto por un momento, pero no es así.

Las medidas establecidas de estado de alarma se alargan, con lo que debemos ofrecer la misma importancia al mantenimiento a los hábitos saludables en el resto de ámbitos.

No olvides la interrelación que existe entre estos tres ámbitos. Una persona con un alto nivel de ansiedad tiene un mayor riesgo de padecer determinadas enfermedades a nivel físico, del mismo modo que una persona con  aislamiento social puede ver afectada su salud psicológica y física.

Por ello, desde nuestro BLOG PSYTECO te ofrecemos unos consejos para mantener unos hábitos saludables en todos los ámbitos: físico, psicológico, social y también intelectual y cognitivo.

HÁBITOS SALUDABLES EN EL ÁMBITO FÍSICO DE LA SALUD

Que nos centremos en el cuidado en relación a evitar el contagio por coronavirus, no significa que dejemos de lado el cuidado del resto de afecciones o enfermedades que pudiésemos tener o la sintomatología de otras nuevas.

Por ello, no abandones ningún tratamiento médico, asegúrate de contar con las recetas y medicación necesarias para ello durante el tiempo que se aconseja el confinamiento. Si tu estado de salud o circunstancias desaconsejan salir de casa, solicita a otra persona que pueda acudir a la farmacia por ti. Y por supuesto, no te automediques.

Atento/a a cualquier sintomatología que en otras circunstancias te hubiese llevado a una consulta médica. Si tenías alguna consulta de seguimiento establecida, asegúrate si sigue la cita en pie o no.

Además, cuida de tu salud física con los siguientes hábitos:

• Alimentación variada y saludable, con horarios apropiados y evitando abusar de dulces, grasas y el picoteo entre horas. Te puede ayudar hacer una planificación de los menús semanales, que así faciliten la compra de la forma más espaciada en el tiempo posible.
• Evitar el consumo de alcohol, el tabaco y por supuesto cualquier otra sustancia, así como controlar el consumo de café o té.
• Mantener hábitos de higiene apropiados, aunque no salgas de casa. Igualmente, si tienes más tiempo, puede ser buen momento para darte un baño con espuma, echarte cremas… “mimarte”, en definitiva.
• Descansa de forma adecuada, manteniendo horarios y rutinas apropiados para ello.
• Realiza ejercicio físico en casa, evitando el sedentarismo. Con cuidado  de no lesionarte.
• Cuidado con las caídas y accidentes en el hogar.

HÁBITOS SALUDABLES EN EL ÁMBITO PSICÓLOGICO DE LA SALUD

Ya hemos hablado en este blog de cómo gestionar emocionalmente esta situación pero nunca es suficiente recordar que una gestión emocional apropiada de cualquier situación que vivamos, por negativa que sea es imprescindible para mantener un buen nivel de salud física, social y emocional.

Así pues, para el cuidado psicológico de tu salud:

• Es momento de entrenar tu capacidad de adaptación así como tiempo de poner en práctica la resiliencia. La resiliencia es aprovechar las adversidades para aprender de nosotros/as mismos/as y crecer personalmente.
• Gestiona de forma apropiada tus emociones. No intentes ocultarlas ni disimularlas, ni ser fuerte. Admítelas, escúchatelas, compártelas si lo necesitas y a partir de ahí, la búsqueda de soluciones adaptadas será mucho más fácil. Ahora, sin las prisas del día a día puede ser un buen momento para parar y pensar en ti así como para reflexionar sobre toda tu vida.
• Si estabas en tratamiento psicológico anteriormente, no lo interrumpas. Si tu estado anímico y emocional está más vulnerable, esta situación te puede afectar aún más.
• No focalices toda tu atención en el coronavirus. Intenta limitar la información y conversaciones con respecto al tema y busca sólo noticias veraces y contrastadas y nunca de forma constante. Con una vez al día que estés informado/a, es suficiente.
• Realiza una planificación de actividades diarias que te ayuden a mantener rutinas y cubrir cada uno de los ámbitos de tu vida, en la medida de lo posible: higiene, trabajo-estudios, tareas de la casa, relación familiar, relación social, relación de pareja, actividades de ocio, ejercicio físico.
• Dedícate momentos de silencio, soledad, reflexión, introspección y calma.
• Haz prácticas de respiración, relajación, meditación.
• Precaución con el consumo a través de Internet, compras, apuestas, juegos… Si existían conductas adictivas anteriores con más hincapié pero también si no era así, hay un riesgo alto para el desarrollo de las mismas.
• Si te cuesta gestionar tus emociones de forma apropiada o sientes miedo y preocupación por el futuro o mucha tristeza o ansiedad. Si sientes que no puedes con todas tus responsabilidades y te muestras irascible y enfadado de forma constante. Si te obsesionas con las noticias o si la situación en casa a nivel familiar, de pareja o con los hijos/as te supera, no dudes en consultarlo y pedir ayuda cuanto antes. Si no lo haces, el daño psicológico puede ser mayor.
• Si eres de los/as que cuidas, proteges y ayudas a los demás por tu actividad profesional o familiar, no te olvides de cuidar de ti. Soportas mayor carga emocional y física y esto puede traerte consecuencias. Pide los apoyos que necesites y no descuides tu propia salud.

 HÁBITOS SALUDABLES EN EL ÁMBITO SOCIAL DE LA SALUD

Quizás no podamos activar este ámbito como nos gustaría pero sigue habiendo opciones gracias a las tecnologías. Hemos hecho referencia a este aspecto en otros artículos de nuestro blog. Te invitamos a leerlos pinchando aquí y aquí.

• Mantén el contacto con familiares, amigos y allegados utilizando todas las posibilidades que nos permiten las telecomunicaciones e intentando no focalizar esta relación en el tema del coronavirus.
• Afianza y cuida la relación interpersonal con las personas con quien convives:
  • Evita discusiones y reproches.
  • Ponte en el lugar de los demás.
  • Expresa sentimientos positivos y de gratitud.
  • Coopera y colabora de forma equilibrada en las tareas cotidianas y de gestión del día a día.
  • Expresa sentimientos negativos de forma adecuada, sin gritos ni ataques personales.
  • Busca momentos para la intimidad y soledad.
  • Comparte actividades de ocio, juego y entretenimiento, también lo puedes hacer de forma online con personas con las que no convives.

Es momento también para pensar de forma global, para incidir en valores sociales de responsabilidad, empatía, respeto, relación humana, cooperación, altruismo y solidaridad; aspectos que sin duda además de favorecernos a nivel social, nos enriquecerán como personas.

Además, no queremos olvidarnos en este artículo de otra parte muy importante de la salud: la parte cognitiva, intelectual y de enriquecimiento personal.

Recuerda la importancia de cuidar todas nuestras capacidades y áreas cerebrales para favorecer su mantenimiento y evitar el deterioro cognitivo:

• Escribe, calcula, realiza pasatiempos, lee.
• Escucha música, canta, baila, toca un instrumento, recita una poesía, actúa.
• Estudia, realiza un curso de actualización profesional a distancia, repasa apuntes o documentación profesional, piensa en nuevos proyectos profesionales.
• Pinta, dibuja, cose, haz manualidades, bricolaje, puede ser momento para montar esa estantería que tenías pendiente o reorganizar armarios o cajones o hacer una limpieza general.
• Cuida de plantas y mascotas.
• Revisa fotos, recuerdos.
• Ve películas, series, coméntalas o escribe qué te han parecido.
• Haz tu receta de cocina favorita.
• Juega y pon en práctica toda tu creatividad e imaginación.
• Mira por la ventana, observa con detenimiento lo que ves, aprovecha para relajar tu vista mirando lejos para descansar la vista. No abuses de las pantallas y aprovecha a estimular tu creatividad.

Mucho ánimo, paciencia y recordad, para cualquier aclaración, no dudes en contactar con nosotros.

En PSYTECO seguimos totalmente disponibles para poder atenderte vía telefónica, videoconsulta y si es de forma presencial, siguiendo todas las medidas sanitarias indicadas.

CLÍNICA PSYTECO, C/ Lancia, nº 3 – 2º Derecha. Tlf.: 987 26 32 88