Hoy, tercer lunes de enero, ha sido denominado Lunes triste (Blue Monday en inglés) por ser el día más deprimente del año. Concepto creado por un profesor de la Universidad de Cardiff y utilizado en 2005 como parte de una campaña publicitaria de una agencia de viajes, no tiene ningún tipo de constancia científica.
No lo permitas
En cambio, seguro que hoy lo escuchas en medios de comunicación e incluso en tus redes sociales habrá alguna que otra referencia al mismo.
Evidentemente la tristeza, igual que la alegría es una emoción que todas las personas sentiremos en innumerables ocasiones en nuestra vida, en diferentes circunstancias e intensidades dependiendo la causa que la motive. Y como el resto de emociones tiene su utilidad. No se trata de evitarla, sino de comprenderla y gestionarla de un modo apropiado.
Si bien es cierto que el frío o que oscurezca pronto puede generar un estado de ánimo más bajo, no existe ninguna evidencia científica que pueda confirmar que un día cualquiera pueda ser triste de forma generalizada, para todas las personas y en todos los lugares del mundo.
Por ello, hoy, Blue Monday, desde PSYTECO te animamos a luchar contra el Lunes triste, convirtiéndoles en un Lunes alegre. Y ¿cómo?: Con el poder de tu sonrisa.
Cuando te ríes y sonríes, tu cerebro se oxigena y el sistema límbico se activa. Si nos reímos, liberamos endorfinas, sustancias responsables de la sensación de placer y estados de ánimo positivos. Además, se reduce la liberación de cortisol, hormona del estrés. Liberarás dopamina, sustancia asociada con emociones positivas.
Acércate al espejo y dedícate una gran sonrisa. Con este gesto consciente, cambiarás tu estado de ánimo y aumentarás tu optimismo
Además, no te olvides del efecto que una sonrisa tiene a nivel social. Una persona sonriente ofrece una compañía más agradable. Una sonrisa ayuda a liberar barreras con otras personas, genera confianza y además, se contagia.
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