LAS AUTOLESIONES

“….me he enterado que mi hijo/a se hace cortes en los brazos o en las piernas, he visto cicatrices de quemaduras a un familiar, alguien de mi entorno se autolesiona…”

Vivir alguna de las situaciones descritas nos generaría un alto grado de preocupación a cualquiera provocando que se encendieran todas nuestras alarmas temiendo la amenaza del suicidio.

Si bien es cierto que no deberíamos pasar por alto ningún acto de autolesión ya que tiene su importancia y relevancia, las autolesiones no suelen tener la finalidad de ser letales. Por ello, se define la autolesión como la provocación deliberada de lesiones en el propio cuerpo sin finalidad suicida.

Los medios con los que se realizan pueden ser muy diversos: gracias a diferentes objetos afilados, produciendo quemaduras o golpes, incluso morderse o arrancarse el pelo de la cabeza pueden ser formas de realizar esas autolesiones.

Pero…. ¿Cuáles son los factores que llevan al autolesionismo?

La principal motivación que encuentra la persona para autolesionarse es generar un alivio de emociones que generan malestar. Digamos que el daño que se generan les permite intercambiarlo por un malestar emocional que generalmente es más difícil de tolerar. Por ello pueden producirse tras momentos de mucha tensión, rabia o enfado o cuando la persona tiene un alto nivel de ansiedad.

Casi la mitad de los casos de autolesiones se producen durante el transcurso de diferentes trastornos psicológicos, siendo muy frecuentes en el Trastorno límite de la personalidad (TLP).

Otras posibles motivaciones asociadas a la autolesión son llamar la atención para recibir un apoyo de su entorno, castigarse por algo que consideran hacen mal, recuperar la sensación de control sobre su vida o ayudarles a sentirse vivos por suplir un vacío existencial.

Has de saber que detrás de la autolesión siempre hay alguna dificultad a nivel psicológico que si bien en inicio no supone un riesgo alto de suicidio sí es indicativa de que algo le está ocurriendo a la persona que las está realizando.

A nivel psicológico, por ejemplo: baja autoestima, imagen corporal distorsionada, sentimientos de rechazo por parte del resto, baja tolerancia a la frustración, ansiedad generalizada…

Igualmente, circunstancias relacionadas con la autolesión al margen de la personalidad son:

• Sufrir o haber sufrido bullying.
• Tener un embarazo no deseado.
• Sufrir abuso sexual.
• Suicidio o autolesiones de personas cercanas.
• Problemas económicos o familiares.

¿Qué hago si alguien cercano se autolesiona?

Por todo lo ya expuesto, has de saber que es muy importante no pasar por alto ninguna autolesión sino tomarla como uno de los signos de que algo le está ocurriendo a la persona que las realiza y que cuanto antes se aborde psicológicamente, antes conseguirá superarlo.

Por este motivo, si lo has detectado, intenta hablar abiertamente, con tranquilidad, sin alarmas ni reproches sobre el tema. Facilitarás que la persona pueda expresar sus emociones de una forma alternativa a la autolesión y además podrás aconsejarle la búsqueda de apoyo psicológico para averiguar su origen a través de la evaluación psicológica y la posterior intervención psicológica.

En Psyteco podemos ayudarte, no dudes en consultarnos sin compromiso tanto para ti como para un allegado en los teléfonos 987 26 32 88 ó 687 51 01 61.