MI HIJO/A TIENE ALTAS CAPACIDADES Y SUSPENDE….¿PUEDE SER?

Según las estadísticas publicadas por el MEC, el alumnado existente en la provincia de León con altas capacidades intelectuales en todas las etapas asciende a 124. 

Contrastamos estas cifras con  nuestra experiencia en Psicología Clínica y Escolar desde 1993 y nos surgen muchos interrogantes. ¿No parece un número muy escaso? ¿Estarán todos los casos debidamente identificados? ¿Qué apoyos y atención específica recibe el alumnado con Altas Capacidades? ¿Se detectan eficazmente todos los casos?

En PSYTECO, en nuestra consulta de Psicología Clínica de Adultos en León, nos hemos encontrado en varias ocasiones con personas que abandonaron sus estudios o que sufrieron fracaso escolar, aún teniendo alta capacidad intelectual. Relatan que lo tratado en clase les aburría. A partir de ahí hablaban con otros, interrumpían o simplemente se abstraían llegando a suspender y abandonar los estudios.

La sintomatología que presenta un niño o niña con Altas Capacidades a veces lleva a confusión y si no se realiza una evaluación adecuada en muchas ocasiones genera etiquetas de “niño difícil” “desmotivado” “vago”, “prepotente”, “despistado” “con carácter”…. llegándose incluso en ocasiones a sospechar y/o confundir con TDAH.

Las Altas Capacidades Intelectuales engloban la sobredotación, el talento y la precocidad intelectual.

Hablamos de sobredotación cuando la persona tiene una excepcionalidad muy superior en todas las áreas de la inteligencia; de talento, cuando es en una aptitud específica o en varias combinadas, estando dentro de la media en el resto de aptitudes

Y la precocidad intelectual definiría aquellos niños que adquirieron de forma temprana algunos hitos intelectuales o psicomotrices, por ejemplo comenzaron a hablar antes de los dos años o a escribir antes que el resto de sus compañeros de edad.

Además, alguna de las características que se pueden observar en niños/as con altas capacidades son:

• Alta creatividad.
• Rapidez a la hora de procesar la información.
• Amplia curiosidad, frecuentes preguntas de “¿y por qué?”.
• Muestras de un alto interés y esfuerzo ante determinados temas de su interés. Por ejemplo niños/as que saben de memoria los nombres y características de todos los dinosaurios, de coches, lugares…
• Mucho sentido de la justicia: “no es justo…”
• En algunos casos muestran intensidad emocional y baja tolerancia a la frustración que les lleva a estallidos en forma de rabieta; lo que puede llevar a confundirlo con problemas conductuales.

Si sospechas que tu hijo/a pueda tener altas capacidades, es importante realizar una evaluación para determinarlo y saberlo con exactitud. No tengas miedo a que esto le etiquete o le condicione de forma negativa. Saberlo te permitirá manejar dicha información para beneficiar a tu hijo del modo que sea más positivo para él: para estimularle de forma adecuada, para evitar que llegue a desmotivarse, para facilitarle una mejor gestión emocional, entrenar sus habilidades sociales y potenciar todos sus talentos y capacidades.

En PSYTECO somos especialistas en Psicología Escolar. Evaluación e Intervención. Consúltanos sin compromiso en el teléfono 987 26 32 88.

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