MITOS DEL AMOR ROMÁNTICO:

EL OBJETIVO DE LA PAREJA

Seguimos en nuestro blog de PSYTECO abordando todos esos mitos del amor romántico con el fin de que no nos condicionen en nuestra vivencia del amor, los encuentros y relaciones de pareja sino que nos permitan una vivencia libre, personal y sobre todo que nos haga felices.

Como sabrás, ya hemos dedicado artículos con anterioridad en nuestro blog a desmontar otros mitos del amor romántico. Puedes acceder a ellos pinchando en este enlace aquí.

Hoy queremos centrarnos en el objetivo o fin que se espera de las relaciones de pareja.

Si bien es cierto que progresivamente nuestra sociedad va teniendo la oportunidad de convivir con modelos de pareja diferenciados y que por ello existen menos condicionantes, aún existen ideas en nosotros y nosotras con respecto al fin que se espera de una relación de pareja.

Igual que cada persona es única y diferente aunque tenga semejanzas con otras, el proceso de atracción-enamoramiento y posible amor que nace entre dos personas también es único y diferente, no sólo por la conjunción que se crea entre ambos sino porque cada persona va a vivir de un modo distinto cada relación que surja en su vida. Su bagaje personal y sus circunstancias personales harán que así sea.

Es por esto que la forma ideal de vivir una relación de pareja no está en pretender un determinado objetivo sino en la vivencia de cada momento e instante en la misma de cara a que cada uno de los miembros de la misma diseñen el objetivo que les haga más felices. Lo más adecuado en este caso, será que este fin u objetivo sea compartido pero si no lo es, al menos que pueda negociarse y pactar entre ambos de modo que su final responda a las necesidades y expectativas personales de cada uno de ellos más que a otros condicionantes familiares o sociales.

Uno de los condicionantes que más influyen en este aspecto y por ello muchas personas lo establecen como el fin último de una relación es la necesidad de que la pareja evolucione hacia un modelo de convivencia o matrimonio y en muchos casos el proyecto de tener hijos/as.

Si una persona es lo que desea y coincide que su pareja también, este modelo seguro que les hace felices.

Pero, ¿cuándo aparecería el problema?

En aquellos casos en los que pueda más el deseo de llegar a cumplir este objetivo o expectativa más que la reflexión personal de si es la persona adecuada con la que se quiere cumplir esos objetivos. En estos casos se corre el riesgo de forzar determinadas relaciones de pareja que sin estar influenciado por estos condicionantes, quizás las decisiones fuesen otras.

Otra situación, la tenemos en la cara opuesta de la moneda, ya que puede suceder que relaciones de pareja que podrían funcionar y  evolucionar de forma positiva para ambos miembros pero que por circunstancias no puedan culminar en la convivencia, se descarten sin contar con la posibilidad de que pueden existir otros modelos de relación. Aquí hablamos de parejas que igual trabajan y/o viven en ciudades diferentes o parejas con hijos/as de relaciones anteriores que prefieren no convivir…

Por tanto, habrá que valorar siempre la satisfacción que aporta la relación en sí, si cumple las expectativas de vida de la persona y en definitiva, si nos hace felices, por encima de los condicionantes que imponen estos mitos.

Para finalizar, es importante hacer mención también de aquellas personas que deciden y desean vivir sin una pareja estable o sin hijos/as no se vean influenciadas por estos mitos ya que les puede provocar una insatisfacción y estigma. Y de nuevo, de forma diferenciada por género y edad. Ejemplo de ello, lo tenemos en el estereotipo social existente en el que a una mujer se le consideraría una “solterona” y al hombre un “soltero de oro”.

Desmontemos estas creencias en nosotros/as mismos/as y educa en ellas a los más pequeños y pequeñas…

Consigamos relaciones de pareja libres y felices sin creencias que las entorpezcan.

En PSYTECO somos especialistas en Terapia de Pareja, Igualdad y Sexología. Consúltanos sin compromiso en el teléfono 987 26 32 88.