La ansiedad influye de forma negativa en el desarrollo de nuestra respuesta sexual, por ello es habitual que personas con algún trastorno relacionado con esta, pueda tener alguna dificultad en su deseo, excitación, orgasmo…

En este caso se trata de una dificultad relacionada con la eyaculación y aunque suele ser más frecuente la eyaculación precoz o falta de control en la eyaculación, la aneyaculación o imposibilidad de eyacular o hacerlo de forma retardada también es común.

Las causas de esta dificultad en vuestro caso pueden estar influenciadas por la medicación pero por lo que relatas, parece más relacionado con causas psicológicas y con la preocuación de eyacular y los intentos para ello que hacen que aumente la ansiedad y con ello de nuevo más dificultad.

Os recomendamos que consultéis con el médico que le hace el seguimiento de la medicación para que lo tenga en cuenta e igualmente consultar con un sexólogo experto que pueda hacer una evaluación más exhaustiva del caso así como ofreceros pautas que mejoren la situación. Cuanto antes se interviene en cualquier dificultad sexual, antes se resuelve.